Todos hemos estado ahí alguna vez: cuando piensas que no puedes caer más bajo, cuando crees que no hay solución a tu problema, cuando has fracasado en algo que para ti era muy importante, cuando te sientes estancado.
Quizás te haya pasado más de una vez. En ese caso, puedo decirte que de la misma forma en la que lo superaste en aquel entonces, puedes hacerlo una vez más.
Esa es la única clave, la más importante: puedes superarlo! No importa cuantas veces te lo tengas que repetir: vas a superarlo. De alguna forma, cueste lo que cueste, tienes que mantener la fe. Si crees en Dios, en una fuerza superior o solo en ti mismo o en lo que deseas, tienes que aferrarte a una idea que te de un rayito de luz cuando todas las otras luces parezcan apagadas.
PASOS PARA SALIR DEL ABISMO
1. Desahogate. Este paso es fundamental. Tienes que empezar con la mente lo más clara posible, pero eso no sucederá hasta que hayas "tocado fondo". Llora, grita, habla con una persona de confianza... en fin. Todos somos diferentes pero todos necesitamos dejar salir nuestra frustración y nuestro dolor antes de dejar ir lo que nos duele. Pero cuida de que solo sea durante un plazo corto. Normalmente unas cuantas horas es suficiente. Pero si se trata de haber perdido a un ser querido o una relación importante, por ejemplo, permitete un tiempo mayor para desahogarte. Analiza la situación lo mejor que puedas. Reconoce que algo de lo que has hecho hasta ahora no ha funcionado (o no te encontrarías en esta situación) y acepta que tienes que darle un giro a tu vida de hoy en adelante.
2. Lluvia de ideas. Despeja tu mente pasando tus ideas y pensamientos en papel o en un archivo digital. Descarga todo lo que no te deja pensar claramente. Escribe también todo aquello que esperas y piensas que puedes hacer. Por el momento no tienes que ser realista. Deja volar tu imaginación. No te detengas a pensar si lo que escribes puede llevarse a cabo o no.Todas las ideas son buenas en este momento.
3. Crea un plan de acción. Ahora sí es momento de ser realista. Selecciona las ideas que te sean útiles y estructuralas hasta tener de 1 a 3 metas generales para salir adelante. Evalua que recursos necesitas y que es lo que tienes ahora. Calcula cuanto tiempo y ayuda necesitas.
4. Escalona tus metas. Divide cada meta en escalones sencillos y establece un tiempo adecuado para cada paso. Cuanto más simples y fáciles de llevar a cabo sean, más posibilidades tienes de cumplirlas. Recuerda hacer un paso a la vez y trata de ser constante. Cuanta más información tengas sobre lo que se requiere para lograr tus objetivos, mejor podrás elaborar los escalones que te llevarán al triunfo.
5. Pide ayuda. Muchas veces no puedes hacer todo tú solo y en muchos casos algo de asesoria puede ser muy útil. Puedes buscar entre tus contactos, pero también puedes acudir a grupos e instituciones especializadas.
6. Sé paciente. Hay muchas cosas que están fuera de nuestro control. Personalmente, encuentro muy difícil ser paciente en situaciones difíciles, pero he aprendido que en ocasiones es mejor analizar bien la situación antes de actuar y que muchas veces la "solución más rápida" no es la mejor.
7. Ánimo. Podrá parecer paradógico, pero tienes que actuar con mucho optimismo, humor y fuerza en los momentos en los que te sientes más pesimista y vulnerable. Yo sé que no será fácil sonreír, pero intentalo. Sonríe ahora mismo aunque no lo sientas. Ponte derecho y levanta la cara. Al cabo de unos segundos, estarás de mejor humor solo por estos simples gesto corporales. Fingir actitudes puede parecerte falso, pero pruebalo cada vez que te sientas bajo de ánimo y sin que te des cuenta dejarás de fingirlo y te sentirás así de verdad.
8. Cuida de ti. Una alimentación saludable y dormir adecuadamente harán milagros. Entiendo que te sientas con ganas de no hacer nada, que no tengas hambre y que posiblemente hasta sientas deseos de dormir todo el día. Pero resiste estos impulsos! Necesitas forzarte un poco. Toma una ducha caliente o fría. Sal a la calle o a un parque a respirar aire puro. Come algo nutritivo (el chocolate te animará), ejercitate un poco, escucha música alegre y duerme 8 horas. Sonríe. Da pasos amplios en una buena postura. Te sentirás como renovado (a pesar del gran esfuerzo que hiciste para dejar de sentirte miserable).
9. Toma fuerzas. Una ver que tengas el plan de acción hecho, tendrás que hacer acopio de todas tus fuerzas Probablemente tengas algún ser querido que necesite de tí, esfuerzate por esa persona. También puede ser que tuvieras un anhelo de más joven o que tengas un deseo muy fuerte en tu corazón, manten esa imagen en tu mente. Sino, sencillamente piensa que no tienes otra opción más que salir adelante. Quedarte estancado, sintiendote de esta manera para siempre NO es una opción. Estoy segura de que no quieres sentirte así un día más! Sacar fuerza de tu dolor es incluso más poderoso que sacar fuerza de tus alegrías. Mucha gente dice "hacer de tripas corazón". Así que recoge los pedazos rotos de tu corazón, respira hondo y adelante!
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